Comparación entre fobia social y fobia escolar.

AspectoFobia socialFobia escolar
SíntomasMiedo intenso y persistente a situaciones sociales y temor a ser juzgado o evaluado negativamente por otros.Miedo intenso y persistente a situaciones escolares y temor a ser juzgado o evaluado negativamente por otros compañeros o profesores.
Edad de inicioAdolescencia o edad adulta temprana.Infancia o adolescencia temprana.
DesencadenantesSituaciones sociales como hablar en público, conocer gente nueva, asistir a fiestas o reuniones.Situaciones escolares como presentaciones en clase, participación en deportes, comer en el comedor escolar.
Impacto en la vida diariaPuede limitar las relaciones sociales, el trabajo y la vida académica.Puede limitar el rendimiento académico, la participación en actividades escolares y las relaciones con compañeros y profesores.
TratamientoTerapia cognitivo-conductual, medicación ansiolítica, terapia grupal.Terapia cognitivo-conductual, terapia familiar, intervenciones escolares.

Este cuadro comparativo muestra las diferencias entre la fobia social y la fobia escolar. Ambas fobias implican un miedo intenso y persistente a situaciones específicas, pero la fobia social se centra en situaciones sociales en general, mientras que la fobia escolar se limita a situaciones escolares. La edad de inicio y los desencadenantes también difieren entre ambas fobias. La fobia social generalmente comienza en la adolescencia o edad adulta temprana, mientras que la fobia escolar comienza en la infancia o adolescencia temprana. Los desencadenantes de la fobia social son situaciones sociales como hablar en público, conocer gente nueva o asistir a fiestas, mientras que los desencadenantes de la fobia escolar son situaciones escolares como presentaciones en clase, participación en deportes o comer en el comedor escolar. El impacto en la vida diaria también difiere entre ambas fobias, ya que la fobia social puede limitar las relaciones sociales, el trabajo y la vida académica, mientras que la fobia escolar puede limitar el rendimiento académico, la participación en actividades escolares y las relaciones con compañeros y profesores. El tratamiento para ambas fobias puede incluir terapia cognitivo-conductual y otras intervenciones, pero puede variar en función de la edad y las necesidades individuales del paciente.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Subir

Para ofrecer las mejores experiencias, utilizamos tecnologías como las cookies para almacenar y/o acceder a la información del dispositivo. El consentimiento de estas tecnologías nos permitirá procesar datos como el comportamiento de navegación o las identificaciones únicas en este sitio. No consentir o retirar el consentimiento, puede afectar negativamente a ciertas características y funciones. Leer Más