Cuadro comparativo de contratos típicos y atípicos.

	Contratos Típicos	Contratos Atípicos
Definición	Contratos regulados por la ley, que tienen una estructura y cláusulas comunes.	Contratos que no están regulados por la ley y no tienen una estructura o cláusulas comunes.
Partes	Partes comunes: empleador-empleado, vendedor-comprador, arrendador-arrendatario.	Partes no comunes y muy diversas: franquiciador-franquiciado, concesionario-concedente, consultor-cliente.
Formalidades	Requieren formalidades específicas, como la firma de un contrato escrito y la presencia de testigos.	No requieren formalidades específicas, pueden ser verbales o escritos y no necesitan de testigos.
Duración	La duración es determinada por la ley o por las partes y puede ser de corto o largo plazo.	La duración es determinada por las partes y puede ser de corto o largo plazo.
Obligaciones	Las obligaciones son preestablecidas y comunes a todos los contratos típicos.	Las obligaciones son establecidas por las partes según las necesidades de cada contrato.
Resolución	Pueden ser resueltos por incumplimiento de alguna de las partes o por mutuo acuerdo.	Pueden ser resueltos por incumplimiento de alguna de las partes o por causas específicas establecidas en el contrato.

Este cuadro comparativo muestra las principales diferencias entre los contratos típicos y atípicos. Los contratos típicos son aquellos que están regulados por la ley y que tienen una estructura y cláusulas comunes. Por otro lado, los contratos atípicos son aquellos que no están regulados por la ley y no tienen una estructura o cláusulas comunes.

Entre las diferencias más importantes, se encuentran las partes involucradas en cada tipo de contrato, las formalidades necesarias para su celebración, la duración, las obligaciones establecidas y las causas de resolución. Es importante tener en cuenta estas diferencias al momento de celebrar un contrato y elegir la opción que mejor se adapte a las necesidades de las partes involucradas.

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