Cuadro comparativo del egoísmo.

Este cuadro comparativo del egoísmo presenta una comparación entre dos tipos de egoísmo: el egoísmo sano y el egoísmo negativo. El egoísmo sano se refiere a la práctica de cuidar de uno mismo sin dañar a los demás, mientras que el egoísmo negativo se enfoca solo en los intereses propios sin importar las consecuencias para los demás.

Las causas del egoísmo sano se relacionan con el equilibrio emocional y la satisfacción personal, mientras que las del egoísmo negativo se enfocan en la obtención de beneficios a cualquier costo. Las consecuencias del egoísmo sano permiten el desarrollo personal y la autoestima, mientras que el egoísmo negativo genera conflictos interpersonales y aislamiento social.

En cuanto al comportamiento, el egoísmo sano se preocupa por satisfacer las necesidades y deseos propios sin perjudicar a los demás, mientras que el egoísmo negativo se enfoca solo en los intereses propios sin importar las consecuencias para los demás. Finalmente, los objetivos del egoísmo sano buscan el bienestar propio y de los demás en un equilibrio saludable, mientras que el egoísmo negativo busca el bienestar propio sin importar el daño que pueda causar a los demás.