Cuadro comparativo de la gonorrea
| Aspecto | Gonorrea | Otras infecciones de transmisión sexual |
|---|---|---|
| Causada por | Bacteria Neisseria gonorrhoeae | Diferentes bacterias y virus |
| Síntomas | Dolor al orinar, secreción uretral o vaginal, dolor abdominal bajo, sangrado entre períodos, dolor durante las relaciones sexuales | Varios síntomas diferentes según la infección, incluyendo secreción, dolor al orinar, dolor abdominal, erupciones, úlceras y dolor durante las relaciones sexuales |
| Métodos de transmisión | Sexo vaginal, anal y oral sin protección | Sexo vaginal, anal y oral sin protección, contacto piel con piel |
| Diagnóstico | Prueba de cultivo de la bacteria, prueba de amplificación de ácido nucleico (NAAT) | Pruebas de sangre, cultivo, NAAT, prueba de antígeno, examen físico y síntomas |
| Tratamiento | Antibióticos, como ceftriaxona e azitromicina | Antibióticos específicos para cada infección, como penicilina para la sífilis y aciclovir para el herpes |
| Complicaciones a largo plazo | Infertilidad, enfermedad inflamatoria pélvica, abscesos, mayor riesgo de VIH y otras infecciones de transmisión sexual | Infertilidad, enfermedad inflamatoria pélvica, mayor riesgo de VIH y otras infecciones de transmisión sexual |
Este cuadro comparativo muestra las principales diferencias entre la gonorrea y otras infecciones de transmisión sexual. La gonorrea es causada por una bacteria específica, la Neisseria gonorrhoeae, y causa síntomas como dolor al orinar, secreción uretral o vaginal, dolor abdominal bajo, sangrado entre períodos y dolor durante las relaciones sexuales. Otras infecciones de transmisión sexual pueden tener síntomas diferentes.
La transmisión de la gonorrea y otras infecciones de transmisión sexual ocurre principalmente a través del sexo vaginal, anal y oral sin protección, aunque algunas infecciones también pueden transmitirse por contacto piel con piel.
El diagnóstico de la gonorrea se realiza mediante pruebas de cultivo de la bacteria o pruebas de amplificación de ácido nucleico (NAAT), mientras que el diagnóstico de otras infecciones de transmisión sexual puede requerir una variedad de pruebas.
El tratamiento de la gonorrea y otras infecciones de transmisión sexual varía según la infección, pero generalmente implica el uso de antibióticos específicos para cada bacteria o virus. Las complicaciones a largo plazo de la gonorrea y otras infecciones de transmisión sexual pueden incluir infertilidad, enfermedad inflamatoria pélvica, abscesos y un mayor riesgo de VIH y otras infecciones.
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